La proteína de soja hidrolizada se deriva de soja. La planta es originaria de Asia oriental, donde se utilizaba incluso antes de la aparición de la escritura. La soja contiene sustancias con importantes actividades biológicas: entre ellas se encuentran los fosfolípidos (45-60%), los ácidos grasos esenciales (30-35%), las isoflavonas y los inhibidores de proteasa STI y BBI. Las isoflavonas más abundantes en la soja son genisteína y daidzeína que, según diversos estudios, penetran en el estrato córneo y alcanzan las capas vitales de la epidermis. Las isoflavonas estimulan las vías de señalización celular y son capaces de producir efectos antioxidantes en la piel. De este modo, pueden inhibir el daño oxidativo y prevenir los cambios biológicos asociados alel envejecimiento.

Las proteínas hidrolizadas de soja gozan de un gran respeto como eficaces agentes hidratantes para la piel y el cabello. Estas proteínas son capaces de restaurar la elasticidad al tiempo que mejoran significativamente el aspecto general y el bienestar del cabello y la piel. Las proteínas hidrolizadas de soja proporcionan a la piel una agradable sensación de suavidad, tersura y un aspecto especialmente liso y aterciopelado. Además, deben considerarse como el sustituto vegetal de la placenta animal, ya que tienen las mismas características y propiedades. Tienen un alto contenido en nutrientes(oligoelementos y vitaminas) que contribuyen a la regeneración celular de la piel.